El término big data se refiere a la enorme cantidad de información que se genera, recoge y almacena a diario. Estos datos normalmente son analizados por los miembros del departamento de marketing de las empresas para averiguar el comportamiento y las necesidades del usuario.

El big data se genera a partir de nuestras búsquedas en Google, nuestras publicaciones en redes sociales, nuestro historial de visualizaciones en Youtube o nuestras compras online. Dicho de otro modo; estos datos se recopilan analizando nuestro comportamiento en Internet. Todo, absolutamente todo, deja una huella digital a través de la cual las empresas venden nuestros datos para conocer mejor a sus clientes potenciales.

¿Cómo recopilan nuestros datos?

Tal y como hemos dicho, cada movimiento que hagas en Internet va a generar información de interés que utilizarán las empresas para conocerte mejor. Algunas de las fuentes que suministran y generan estos datos son:

  • Transacciones entre personas y sociedades: Desde movimientos bancarios y facturaciones hasta llamadas y correos electrónicos.
  • Acciones de nuestro día a día: Un mensaje de WhatsApp, la actualización de nuestros perfiles en redes sociales, la geolocalización de nuestros smartphones, las visitas a páginas web, el clic en anuncios…
  • Instrumentos externos: Los GPS, pulseras que controlan la actividad física o herramientas de medidas físicas y químicas.
  • Biométricas: Aquí se encuentran lectores de huellas digitales, escáneres de retina o ADN y todo tipo de componentes que formen parte de temas de seguridad y defensa.

Sin embargo, estos datos no siempre están estructurados. Es posible que sí lo estén y vayan acompañados de la edad, el origen, la población, el teléfono o el nombre, pero otras veces será información no clasificada que tendrá que ser interpretada por expertos en la materia.

¿Cómo utilizan las empresas el big data?

Los datos se han transformado en una mercancía que hay que utilizar de forma correcta. No basta con saber qué son los datos, sino también cómo utilizarlos.

De hecho, hay compañías como Google, Amazon y Facebook que recopilan diariamente grandes cantidades de datos de los usuarios para posteriormente venderlos a anunciantes. A continuación, esta información es utilizada para ofrecer productos o servicios específicos según los intereses e historial de búsqueda del usuario.

El big data también es utilizado para entender las tendencias en materia política o económica, ya que puede ayudar a detectar patrones en el sector y a hacer predicciones sobre lo que puede ocurrir a corto plazo. Toda esta información crea valor porque las empresas, e incluso los gobiernos, pueden extraer sus datos y tomar sus propias decisiones basándose en el resultado de los modelos predictivos.

Las empresas utilizan el big data para ganar dinero e incrementar sus beneficios. Si son capaces de analizar adecuadamente la información sabrán qué demandan sus clientes y cuáles son sus necesidades. Hay muchas organizaciones que tienen plantillas específicas conocidas como buyer persona que describen a su cliente ideal, así como mapas de empatía para ponerse en la piel del cliente y detectar sus puntos fuertes y débiles.

¿Qué uso se hace del big data?

El big data es utilizado dentro de muchos sectores y según el plan empresarial se optará por un uso u otro. Destacamos los siguientes:

  • Salud: con la monitorización de nuestras acciones podemos ayudar a investigadores científicos y del mundo sanitario a contribuir con sus investigaciones.
  • Banca y seguros: las entidades financieras ya emplean la monitorización de datos y tienen sus propias bases de datos. De esa manera pueden ofrecer productos y servicios en base a la situación económica de sus clientes.
  • Desarrollo corporativo: gracias a todos estos datos las empresas pueden estudiar mejor a su competencia, mejorar su plan de negocio y conocer mejor a su target.
  • Marketing: al navegar por la red siempre dejamos una huella que es utilizada por las empresas para optimizar su publicidad, su posicionamiento SEO y adaptar así su plan estratégico.
  • Política: a través del análisis del contenido en redes sociales pueden observarse las preocupaciones y las percepciones de la ciudadanía.

¿Qué futuro le depara al big data?

En una sociedad digitalizada como la de hoy en día se hace más que necesario establecer un marco normativo que regule el big data. Hay varios aspectos que causan controversia en los usuarios y para los cuales no existen leyes específicas.

Por otro lado, cabe comentar que el big data puede ser una de las profesiones del futuro. Aún queda mucho trabajo por delante, ya que se trata de un mundo nuevo que aún está por explotar y no ha dado el boom definitivo.

Por tanto, el big data es un concepto que estará cada vez más presente en nuestras vidas y al cual hay que ir adaptándose tanto jurídicamente, como personal y profesionalmente.

Referencias

Economipedia

Diccionario Bursátil de Eurekers