Finalmente, los autónomos podrán respirar debido a que en 2026 las cuotas a la Seguridad Social no subirán tanto como, en un principio, el Gobierno había anunciado. Más en particular, el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones propuso una subida significativa de las cuotas del régimen de autónomos a partir de 2026, que abarcaría diferentes tramos de ingresos y que, en algunos casos, podía alcanzar incrementos de hasta 206€ mensuales.
Pero, ¿de verdad se puede cantar victoria?
¿Qué se anunció inicialmente y cómo ha cambiado la propuesta?
Cuando se dio a conocer la propuesta inicial para 2026, el ministerio mantuvo que el nuevo sistema de cotización vinculado a los ingresos netos reales (ya iniciado en 2023-25) daría un paso decisivo, como se puede apreciar en la siguiente tabla.

De acuerdo con esta propuesta, las subidas iban a ser bastante significativas a lo largo del próximo año:
- La cuota mínima pasaría a 200€ a 217€ mensuales para quienes ingresen menos de 670€ netos al mes.
- En un tramo medio de, por ejemplo, entre 2.031€ y 2.330€ netos al mes, pasaría de 390€ a 429€.
- Y para los tramos más altos de más de 6.000€ de ingresos reales, el hachazo aumentaría de 590€ a 796€ cada mes.
Pues bien, tras el intenso debate y polémica que se generó durante toda la semana pasada, debido al fuerte rechazo de varias asociaciones del colectivo de autónomos (como ATA), podemos afirmar que se ha conseguido cierta victoria en el sector, pero mucho más pequeña de lo imaginada.

Como es apreciable en el segundo cuadro, al final la sangre no llegará al río. De esta forma:
- En los tramos de ingresos reales más bajos no habrá subida de las cuotas.
- En los tramos intermedios apenas serán de un 1% o 1,5% (lo que en la práctica acabarán siendo “solo” 5€ mensuales).
- En cuanto a los tramos de ingresos más elevados la subida será de un 2,5% -en el peor de los casos 15€/mes-.
Ahora bien, aunque es una victoria muy importante porque, al final, todo lo que sea procrastinar la cuña fiscal siempre es positivo, la guerra está muy lejos de acabarse. Veamos porqué.
¿Cuál es el plan de la cuota de autónomos para 2032?
Y es que lo visto estos días no es más que una ralentización del plan presentado ante Bruselas, como parte de los compromisos de sostenibilidad del sistema público, que incluye una importante subida de cuotas a autónomos de forma escalonada año a año, ajustando los tramos hasta llegar al modelo “real” de aportación. Con todo, el objetivo final es que cada tramo tribute en torno al 30% de sus ingresos reales a fecha de 2032, equiparando progresivamente la carga fiscal de los trabajadores por cuenta propia con la de los asalariados.

En la práctica, esto implicaría que un autónomo con unos ingresos netos de 2.000€ mensuales acabaría pagando una cuota cercana a los 600€, frente a los 320€-350€ actuales. Y aquellos que cobren 4.100€ de ingresos reales deberían soportar una cuña fiscal de 1.375€.
En definitiva, lo que ha hecho el Ejecutivo es posponer las subidas, no eliminarlas. Y con las elecciones previstas para 2027, todo apunta a que también ese año podría aplazarse cualquier incremento relevante. No obstante, si se mantiene el plan comprometido con las instituciones europeas, la cuña fiscal acabará llegando, más tarde o más temprano. Eso sí, para entonces, y con la presión mediática y social que ya se ha demostrado eficaz, tal vez se busque un nuevo equilibrio o acuerdo de última hora que suavice la transición hacia ese sistema definitivo de cotización por ingresos reales.
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