Si ya de por sí resulta interesante la revolución tecnológica que hay en materia de inteligencia artificial, no menos atractiva resulta la implementación robótica que están llevando a cabo diversas empresas como solución de eficiencia, para aliviar los cuellos de botella, en sus procesos productivos.

Y es que la industria americana registró -según un informe del Wall Street Journal-,  44.000 pedidos de robots, el mayor número de pedidos registrado por parte de empresas de la historia, y que a lo largo de este año irá sustituyendo a capital humano.


Solución a la Gran Dimisión: más robots

Parece ser que la causa que está acelerando esta revolución tecnológica es la llamada Gran Dimisión, y por ende,  la completa escasez de trabajadores en EEUU en industrias estratégicas como la automotriz. Pero es que estos trabajadores que dimiten no se van a su casa, sino a otro trabajo mejor remunerado.

De hecho, se calcula que en EEUU, hay más de un millón de puestos de trabajo en oferta respecto a la masa demandante, lo que fuerza a una movilización continua en el mercado laboral. De este modo, aumenta la presión salarial sobre la empresas, lo que abre la posibilidad a que un efecto de segunda ronda, sea trasladado a la inflación en los próximos años.

Por tanto, muchas empresas ya han optado directamente por sustituir el trabajador que abandona su puesto, por un robot. Una inversión que hoy resulta cara, pero que acabará siendo rentable a largo plazo.

Algunas de las empresas que han visto incrementada su plantilla de robots han sido Cadence Design System (CDNS) o John Bean Technologies (JBT), por lo que es de esperar que experimenten un incremento notable de productividad en los próximos años.