Los drones han mejorado muchísimo estos últimos años y su aplicación ayuda cada vez más a ámbitos y sectores de la economía. En este contexto, la policía de varias ciudades de los Estados Unidos ya utilizan drones con Inteligencia Artificial y autónomos.

El programa se ha llamado »Drone as First Responder» y consiste en que en las emergencias que son aptas para el desplazamiento del aparato los agentes no acuden, sino que desde comisaria envían al vehículo autónomo y, a través de cámaras, realizan la inspección. En concreto, el drone ya se desplaza una media diaria de 15 veces y ya se han realizado más de 4.100 vuelos.

Por ejemplo, un drone de estos ayudó en la persecución de un sospechoso de robo y posesión de drogas y, gracias a las cámaras, los agentes pudieron descubrir dónde ocultó la mercancía antes de ser detenido.

El coste de compra de este »nuevo agente» ronda los 35.000$ y -aunque no cotizan en bolsa- empresas como Skydio y Shield AI son los principales proveedores de éstos.