Realizar compras online en gigantes como Amazon, u otros no tan grandes como El Corte Inglés, Ikea o Carrefor, estará gravado con un nuevo impuesto. De esta forma, el Gobierno pretende establecer “una tasa local por la ocupación del dominio público que se produce como consecuencia de la entrega a domicilio de paquetería” Sin embargo, está no será únicamente establecida contra los grandes empresas de entrega a domicilio, sino también sobre la venta online del comercio tradicional. Por lo pronto, Amazon ya ha comunicado que repercutirá este impuesto a otras empresas de reparto o directamente al cliente final. Hasta la fecha, no se ha dado una previsión de recaudación ante el fracaso que supuso la Tasa Google o la nueva Tasa Tobin.