La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), encargada de la supervisión de los mercados financieros, lleva tiempo detrás de las firmas chipriotas detectando reiteradas irregularidades en el mercado español.

En concreto, 169 empresas de inversión chipriota son las que están en el radar del regulador español por operativas abusivas contra el pequeño inversor.

El foco está en la comercialización de CFDs restringidos. Desde 2017, para pequeños inversores al calificarse como productos complejos. También, por publicidad encubierta y ocultación de comisiones a los clientes. Además, permiten apalancamientos superiores a los permitidos.

El hecho de estar domiciliadas en Chipre permite a estas compañías operar en cualquier otro país de la UE, solo bajo de la supervisión del regulador chipriota (CySEC) -que es de las más permisivas de Europa-.

Por tanto, la CNMV cansada de dar avisos a la CySEC y a estas entidades se está planteando directamente prohibir la operativa de estos brokers en España si no hace nada la CySEC o los mismos brokers.