En este artículo hablaremos de una de las fórmulas de salida a bolsa, que más se ha popularizado en los últimos años, las SPACs.

Pero, ¿Qué es una SPAC?, ¿Cómo funciona este modelo de inversión?, y sobre todo, si es tan interesante, ¿cómo puedo invertir en ellas? Todas estas dudas y algunas otras más, las responderemos a lo largo de este artículo

Historia de las SPACs | ¿Cómo surgieron?

Hablar de SPACs, es hablar de un fenómeno bastante reciente. Comenzaron a florecer en el mercado estadounidense en la década de los 90, en áreas como tecnología, salud, logística, medios, retail o telecomunicaciones. Pero los arquitectos de tales firmas fueron los tres fundadores del banco de inversión GKN Securities, quienes luego fundaron EarlyBird Capital para desarrollar el modelo SPAC.

Sin embargo, desde el resurgimiento de los SPAC en 2003, han surgido ofertas públicas de SPAC en una amplia gama de industrias, incluido el sector público, que buscan principalmente cerrar acuerdos en los mercados de seguridad nacional y contratación gubernamental. También en mercados emergentes de alto crecimiento como bienes de consumo, energía, construcción, servicios financieros, medios, deportes y entretenimiento, y China e India.

Y con la llegada de la pandemia en 2020, llegó el año dorado de las SPACs. Los inversores se lanzaron en masa a través de este vehículo de inversión, que como veremos no está exento de dudas y polémica. Tanto es así, que en 2022 hay más de 600 SPACs activas que gestionan cerca de 200.000 millones de dólares, cuando en 2018 apenas había algo más de 100 SPACs que no llegaban ni a los 75.000 millones de dólares. 

Evolución de las SPACs de 2013 a 2020. Fuente: SPAC Research
Evolución de las SPACs de 2013 a 2020. Fuente: SPAC Research

Ahora que ya conocemos de la importancia de las mismas, vamos a ver de qué estamos hablando exactamente. 

¿Qué es una SPAC?

SPAC es un acrónimo que proviene de la expresión Special Purpose Adquisition Company, o lo que es lo mismo, significa sociedad de adquisición con propósito especial

O dicho de otro modo, una SPAC es un tipo de vehículo de inversión que se crea con el fin de recaudar capital para adquirir una empresa existente, motivo por el cual a veces la también las llaman «empresas de cheques en blanco», ya que normalmente no tienen operaciones ni activos propios antes de la adquisición. 

Ventajas de una SPAC

En los últimos años, las SPAC se han hecho cada vez más populares como forma de que los inversores obtengan exposición a empresas de alto crecimiento.

  • Una de las principales ventajas de invertir en una SPAC es que permite evitar el costoso y largo proceso de salida a bolsa mediante una oferta pública inicial, IPO.
  •  Las SPAC también ofrecen una estructura más flexible que las IPOs tradicionales, lo que puede resultar atractivo para las empresas que buscan formas alternativas de obtener capital.

Inconvenientes de una SPAC

Aunque invertir en una SPAC tiene muchas ventajas, también existen algunos riesgos que deben tenerse en cuenta antes de realizar una inversión.

  • Por ejemplo, las SPAC suelen tener un plazo más corto que las IPOs tradicionales para completar una adquisición, lo que puede crear presión para tomar decisiones precipitadas. 
  • Además, las SPAC suelen implicar acuerdos financieros complejos que pueden ser difíciles de entender. Por ello, es importante consultar con un asesor financiero antes de invertir en una SPAC. 
  • Y si finalmente no se celebra la SPAC, el inversor corre el riesgo de perder todo el capital aportado.

¿Cómo funciona una SPAC?

Lo cierto es que se han hecho cada vez más populares en los últimos años como una forma de que las nuevas empresas obtengan capital y salgan a bolsa. No en vano, así es como funcionan las SPAC:

  1. Una SPAC está formada por un grupo de patrocinadores que suelen ser empresarios experimentados, banqueros de inversión o inversores de capital privado. Los patrocinadores identifican un sector o una industria con la que están familiarizados y creen que tiene un fuerte potencial de crecimiento.
  2. A continuación, presentan la documentación ante la SEC para constituir una SPAC y recaudar capital a través de una IPO. Una vez constituida la SPAC, tendrá entre 18 y 24 meses para identificar y adquirir una empresa privada en su sector objetivo.
  3. Después de la adquisición, la SPAC cambiará de nombre para reflejar el nombre de la nueva empresa, y los accionistas tendrán la opción de retirar el dinero en efectivo o seguir manteniendo acciones en la nueva empresa. 

Las SPAC ofrecen una oportunidad única para que los inversores entren en la planta baja de una empresa emergente que está en camino de salir a bolsa. Y como las SPAC suelen estar patrocinadas por inversores experimentados, ya se ha realizado la debida diligencia en las inversiones potenciales. 

Sin embargo, también hay algunos riesgos asociados a la inversión en SPAC, como la posibilidad de que la SPAC no pueda encontrar un objetivo de adquisición adecuado dentro de su plazo, o que la empresa recién adquirida no tenga éxito después de salir a bolsa.

Pero para quienes estén dispuestos a asumir un poco más de riesgo, la inversión en SPACs puede ofrecer la oportunidad de entrar pronto en algunas de las nuevas empresas más atractivas de la ciudad.

¿Cómo invertir en una SPAC?

Lo cierto es que existen diversas formas de invertir en SPACs, desde acciones y ETFs, hasta derivados financieros. No obstante, desde Eurekers, simplemente vamos a tratar las dos formas menos complejas. 

Invertir en SPACs a través de acciones

Lo más adecuado de lo que podemos hablar de invertir en una SPAC es comprar sus acciones en el mercado secundario de dichas empresas a través de un broker de bolsa (aún así, debido al riesgo de operar estas acciones, no se recomienda este tipo de IPO porque son en última instancia, los inversores institucionales y las compañías de seguros, quienes están involucradas en este proceso).

No obstante, si estamos dispuestos a asumir dicho riesgo, las SPACs constituyen una oportunidad de que los inversionistas participen en un modelo similar a un fondo de capital de riesgo, y por ende, no es más que otra forma de diversificación.

En general, estas empresas de cheques en blanco son un modelo especulativo que generan muchos riesgos, motivo por el que los reguladores financieros tratan de proteger los derechos de los inversores y mantener la confianza en el sistema.

Por un lado, el regulador estadounidense, la SEC, lo considera un vehículo de inversión que aunque pudiera llegar a ser rentable, es muy polémico, por lo que monitoriza sus actividades muy detenidamente. Y por el otro, en el caso de España, la CNMV, opina más de lo mismo, y aunque este tipo de operaciones no son comunes en nuestro mercado patrio, no suele recomendar la entrada de este tipo de operaciones

Invertir en ETFs de SPACs

No hay mejor manera de reducir el riesgo que crear una cartera diversificada. Por esta razón, existen los ETFs de SPACs, en los que puede invertir simplemente comprando posiciones en los mismos, como si fueran acciones de una empresa (a través de los servicios de un broker).

Un ejemplo de ello es el ETF SPAC and New Isse (SPCX), el primer producto en gestionar activamente empresas de este tipo, por lo que cuenta con capacidad para gestionar carteras SPAC de forma ágil.

El ETF se incluyó en la lista el 12 de diciembre de 2020, por lo que los datos históricos de rendimiento no están disponibles. Sin embargo, hemos enumerado algunos de los SPACs que componen su cartera.

Empresas en las que invierte el ETF SPAC and New Issue (SPCX). Fuente: SPCX

En nuestro curso de bolsa, siempre hemos abogado por el sentido común, por las inversiones en empresas que conozcamos, que sepamos que hacen, y si ni siquiera dos de los principales reguladores del mundo lo recomiendan, no debería ser una opción de entrada.

Además, si aspiramos a invertir como Warren Buffet, invitamos en aquello que seamos capaces de explicar hasta a un niño, pues es el verdadero síntoma de que entendemos dónde estamos. 

En cualquier caso, conviene explicarlas detalladamente para aquellos inversores más adversos al riesgo.

La burbuja de las SPACs

Según datos de Renaissance Capital, de las 600 SPACs que en 2021 había en bolsa, tan solo un año después el 11% eran más valiosas, y todas las demás había caído una media de 43% de valor, prácticamente la mitad del precio al que salieron, para que sea el fuerte matiz especulativo con el que cargan. Vamos a ver algunos ejemplos de SPACs que fracasaron y otras que tuvieron éxito

Ejemplos de SPAC que fracasaron | eToro y Virgin Galactic

La Sociedad de Adquisición con Fines Especiales de EToro, fue una SPAC que se creó con el propósito expreso de sacar la empresa a bolsa mediante una fusión con una sociedad instrumental que cotizara en bolsa. El director general y fundador de EToro, Yoni Assia, declaró que la SPAC permitiría a la empresa acelerar sus planes de crecimiento y le proporcionaría recursos adicionales para seguir innovando

EToro completó su fusión con PLC en diciembre de 2020, convirtiendo a EToro en una empresa que cotizaría en la Bolsa de Londres. De hecho, la SPAC de eToro recaudó aproximadamente 1.400 millones de dólares en financiación, que se utilizará para apoyar los planes de crecimiento del broker chipriota. Dichos fondos, iban a ser utilizados para ampliar su oferta de productos, invertir en tecnología y ciencia de datos, y hacer crecer su base de clientes

Sin embargo, finalmente eToro anunció que puso fin al proceso y que, en su lugar, intentará cotizar sus acciones en una bolsa de valores. Esta decisión se tomó después de que las conversaciones con posibles socios e inversores revelaran que una IPO tradicional sería una mejor opción para la empresa

Algo parecido ocurrió con Virgin Galactic, con la diferencia de que esta finalmente sí que salió a bolsa, pero de los 210 millones que esperaba recaudar (a su salida), tan solo consiguió 4 millones de dólares.

Ejemplos de SPACs que tuvieron éxito | Burger King

El SPAC de Burger King fue un gran éxito. De hecho, se trató de la mayor oferta del sector de la comida rápida, con un valor cercano a 8.000 millones de dólares. Burger King vendió más de 300 millones de acciones a 24 dólares cada una, lo que supuso una prima del 40% respecto al último precio de cotización de la hamburguesera de Miami. 

Con semejante éxito, Burger King utilizó el dinero para financiar sus planes de expansión, incluyendo la apertura de nuevos restaurantes y la expansión a nuevos mercados. Y lo cierto es que el tiempo le ha dado la razón pues desde que salió a bolsa, a través de dicha fórmula, se llegó a revalorizar cerca de un 70%. 

En definitiva, las SPACs son un vehículo de salida a bolsa algo más complejo y difícil de entender, y raros son los casos de éxito de semejante fórmula. Pero bien es cierto, que aquellas que acudían con un plan bien definido, supusieron auténticos pelotazos para sus primeros inversores.