En Eurekers estamos poniendo a disposición de toda la comunidad inversora, y en particular de la comunidad Eurekers, una serie de calculadoras financieras (rentabilidad financiera, inflación…) que nos ayudarán a llevar un mejor seguimiento de nuestras finanzas. 

Así pues, en el artículo de hoy vamos a explicar qué es la nueva calculadora de rentabilidad, qué aplicaciones tiene, y cómo se utiliza. 

¿Qué es la rentabilidad financiera de un inversor?

La rentabilidad financiera se refiere a la capacidad de un agente inversor para generar unos ingresos superiores al capital inicial que aportó. Para ser rentable, dicho agente debe ser capaz de batir el precio de entrada que tuvo en la compra de un valor. Por supuesto, una vez sea rentable, puede seguir invirtiendo en otras compañías para tratar de maximizar su rentabilidad

Si la cantidad total de ingresos generados es mayor que la cantidad total invertida (sumando comisiones del broker e impuestos), entonces se considera que la inversión ha sido financieramente rentable. 

Hay una serie de factores que pueden influir en la rentabilidad, como los precios, los costes de producción y la demanda del mercado.

En última instancia, la rentabilidad es esencial para que los inversores podamos seguir creciendo. Por ello, es importante formarse antes de entrar en un mercado tan arriesgado como la bolsa, razón por la que en nuestro curso de bolsa, enseñamos a nuestros alumnos a ser rentables a largo plazo, olvidándose de todos los vaivenes del cortoplacismo

¿Cómo se mide la rentabilidad financiera?

A continuación vamos a ver dos ratios de eficiencia con los que mediremos la capacidad anual que tenemos de obtener nuestra aportación inicial, y por ende, lo buenos que somos como inversores. En primer lugar explicaremos que es el Retorno Simple de la Inversión (RSI), y en segundo lugar el Retorno de la Inversión Compuesto (ROI)

¿Qué es el RSI?

El rendimiento simple de la inversión, o RSI simple, es una medida de cuánto ha ganado una inversión durante un periodo de tiempo, expresado como porcentaje de la inversión original. 

La fórmula del RSI simple se calcula dividiendo la diferencia entre el capital obtenido entre el principio y el final del periodo a analizar, entre el número de años que han pasadol. 

RSI = ((Capital final del periodo – Capital inicial) / número de años) / 100

Por ejemplo, si un inversor invierte 100 dólares en una acción que aumenta su valor en 10 dólares en el transcurso de un año, el RSI simple sería del 10%. 

El RSI simple es una métrica útil para comparar diferentes inversiones, pero tiene algunas limitaciones. Por ejemplo, no tiene en cuenta los efectos de la inflación, los impuestos, y lo más importante, el efecto multiplicador del interés compuesto

A pesar de estas limitaciones, el RSI simple puede ser una herramienta útil para evaluar posibles inversiones.

¿Qué es el ROI?

El ROI, o rendimiento de la inversión, es una medida de cuánto dinero u otros beneficios recibe un individuo u organización a cambio de una inversión inicial. 

En el ámbito financiero, el ROI se utiliza a menudo para comparar la rentabilidad de diferentes inversiones, y suele expresarse en forma de porcentaje. Sin embargo, la principal ventaja de este indicador es que si que aplica el efecto multiplicador del interés compuesto. Puedes visitar nuestro artículo de cómo funciona la calculadora financiera online del interés compuesto para saber cómo es. 

Por otro lado, el ROI también puede utilizarse para evaluar resultados no financieros, como el éxito de una campaña de marketing o la eficacia de un nuevo programa de formación de empleados. 

¿Por qué es importante medir tu rentabilidad?

La pregunta puede parecer bastante obvia, no obstante, esconde matices que tal vez no hubieras tenido en cuenta:

Saber si estamos ganando o perdiendo

La primera razón es obvia, tenemos que ser capaces de saber si desde que empezamos a invertir con nuestro capital inicial, estamos ganando o estamos perdiendo. 

Si estamos ganando a largo plazo, es porque actuamos con una estrategia de inversión correcta, y esa es la línea en la que tenemos que seguir operando.

Por el contrario, si perdemos, es porque realmente invertimos a golpe de corazonada y no tenemos un método definido de cómo actuar, de cómo invertir. Momento en el cuál deberíamos pararnos para empezar a pensar cómo podríamos pasar a ser del pequeño porcentaje ganador en bolsa. 

Realmente parece una obviedad, pero saber si somos rentables o no, es el primer y más importante paso que existe en bolsa

Proyectar de nuestra rentabilidad

El segundo motivo, una vez sabemos que estamos ganando es el de proyectar nuestra rentabilidad, para saber el beneficio que podríamos llegar a obtener en el largo plazo.

Para ello, o bien tendremos que hacer uso del ROI si se reinvirtieran los beneficios o dividendos, o bien del RSI si los dividendos se repartieran. 

De ahí que en Eurekers siempre hayamos abogado por la reinversión de los dividendos, ya que a muy largo plazo, nos permitirán ser más rentables que si los beneficios se repartieran, y cada año tuviéramos que volver a ser rentables a partir del capital inicial. 

Evidentemente, que un año hayamos obtenido una rentabilidad del 6% no significa que siempre vaya a ser la misma, ya que dependerá del  mercado, sector y etapa del ciclo económico en la nos encontremos. Pero si a lo largo de los años, con los altibajos correspondientes, hemos sido capaces de trazar una media, con el ROI sí que podríamos averiguar cuál es para ser capaces de proyectar nuestras inversiones a largo plazo. 

Conocer si somos mejores que el mercado

Y por último, conocer nuestro ROI anualizado es importante para saber si en términos medios somos mejores que el propio mercado

Por ejemplo, el SP500 ha crecido un 18% anualizado en los últimos diez años, evidentemente con vaivenes, por ejemplo, el 2018 se dejó un 8% y en 2021 creció más de un 20%. 

En cualquier caso, si a largo plazo somos capaces de batir al mercado, demostraremos que  nuestro método es consistente, y por tanto, la línea en la que debemos seguir. Ahora bien, si no es así, es decir, si en este caso no llegamos a un 7% de rentabilidad anual, tenemos dos opciones (si aspiramos a ser buenos inversores):

  • O bien nos formamos para ser capaces de batir al mercado
  • O bien lo invertimos en un fondo que replique índices de referencia y nos olvidamos.
  • O una opción híbrida de ambas, hasta que seamos capaces de batir al mercado, invertiremos en los índices de referencia, y una vez estemos correctamente formados, empezamos a ser gestores activos de nuestro patrimonio.

¿Cómo usar la calculadora de rentabilidad de Eurekers?

Ahora que ya sabemos la importancia de conocer a ciencia cierta, no solo si hemos sido rentables, si no en qué medida, vamos a proceder a explicar cómo se utiliza la calculadora de rentabilidad de Eurekers

Realmente es algo muy sencillo, tan solo hay que seguir los siguientes pasos.

Una vez llegamos a la web, nos encontraremos con la siguiente pantalla

Calculadora de rentabilidad financiera

Tan solo tendremos que rellenar los siguientes cuatro campos

  • Inversión original: Capital que aportamos el día que empezamos a invertir. En mi ejemplo serán 10.000€
  • Valor final: El capital del que disponemos hoy (o que esperamos obtener en el futuro), suponiendo que no hayamos ido metiendo más cantidades de dinero en todo el periodo. De haberlo hecho, aunque el cálculo no sería del todo correcto, deberíamos sumárselas al campo de inversión original. En mi ejemplo serán 35.000€
  • Años: El número de años que han pasado en todo el periodo que vamos a medir. Em mi ejemplo 15 años
  • Meses: Si ha quedado algún mes suelto, con respecto a cuándo empezamos a valorar. Por ejemplo, si han pasado 15 años (como en mi caso), pero en lugar de exactos, han sido 15 años y 4 meses. 

Una vez introducimos todos los datos, y le damos al botón azul de calcular, la calculadora de rentabilidad nos devuelve la siguiente información

Resultado rentabilidad financiera

¿Cómo se interpretan los resultados de la calculadora de rentabilidad?

Realmente nos ha devuelto dos porcentajes, vamos a verlos: 

  • RSI: Da 16,67% y es la rentabilidad anual obtenida sobre el principal descontando los intereses. Algo bastante complicado, ya que generar esa rentabilidad cada año, retirar los intereses y volver a generarla, es una tarea bastante difícil. Ni los grandes inversores como Warren Buffet conseguirían esas exquisitas rentabilidades, si no fuera porque reinvierten los beneficios o dividendos obtenidos.  
  • ROI: 8,71% un porcentaje mucho más realista, pues supone que es la rentabilidad de cada año, cuyos intereses se reinvierten, y es conforme van pasando los años, como puede observarse en la gráfica de barras, cuando realmente la acumulación de intereses sobre intereses y reinversión de los mismos, los que hacen que con una rentabilidad anualizada bastante menor (pero muy sensata) se consiga más que triplicar el capital inicial en tan solo 15 años. 

Lo cierto es que tomando como bueno el dato del ROI 8,71% nos aporta una información muy relevante:

  • Que somos rentables
  • Que con esa media podríamos llegar a 100.000€ en treinta años (y solo con la reinversión de los intereses, sin contar posteriores aportaciones de fondos)
  • Que no hemos sido  mejores gestores que el propio mercado, ya que recordemos que la rentabilidad media anualizada del SP500 fue del 18% de 2010 a 2021. 

Por lo que podemos, o bien acceder a formarnos, o bien nuestra mejor alternativa sería invertir nuestro dinero en índices de referencia, ya que sobreponderar nuestra cartera de acciones no tendría sentido, pues acabamos de demostrar que el mercado es más eficiente que nosotros como inversores. 

En definitiva, la calculadora de rentabilidad de Eurekers, aplicada junto con el resto, nos permitirá llevar un mayor seguimiento y evaluar nuestras finanzas para que podamos conocer el inversor que realmente somos. 

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