lógica para invertir

Los mercados no arruinan absolutamente a nadie. Muchas veces, algunas personas comentan que "los mercados los habían arruinado". Cuando les respondo que los mercados no arruinan a nadie, se sorprenden. Pero así es. Son los operadores los que se arruinan ellos solos.

No conozco a nadie al que le hayan obligado a comprar acciones, y que las mantengan cuando éstas bajen. Sin embargo, sí es probable que el ego se aferre a unas posiciones, a pesar de que estas no vayan en la dirección que nosotros pensábamos.

Imaginemos que compramos unas acciones a 30€, y vemos cómo descienden, primero a 25€, luego a 20€, 18€, 16€... Y resulta que culpamos a cualquiera de nuestro error. ¿Quién es el culpable en realidad? Está claro: la culpa es nuestra, de nadie más, y hasta que no aceptemos este hecho, será imposible seguir avanzando.

Tu y sólo tu sabes si lo eres, es muy fácil. Si tu cuenta de resultados cada trimestre o cada año, tiene más dinero que el anterior, eres un buen operador; si tienes menos capital eres mal operador.

Lo que ocurre es que a nuestra mente le gusta decir lo que ganamos y callar lo que perdemos. A todos nos gusta que nos digan acertaste al decir que esta acción iba a subir o gracias por aquel consejo que me diste.

La realidad es que en nuestro interior radica la verdad, y ésta no es otra que, si lo que hacemos lo hacemos correctamente los resultados llegarán (en esta y en cualquier profesión)

A veces, podemos perder, pero eso no significa que perder un partido signifique perder la liga. No tenga miedo de perder partidos pero no olvide que su misión es ganar la liga.

El ejemplo que voy a poner para este caso, quizás no sea el más bonito que haya podido encontrar, pero si el más contundente.

Durante el año 2001, hubo un acontecimiento que marcó al mundo: el atentado contra las torres gemelas. Este suceso hizo que las bolsas de todo el mundo se desplomasen.

En 2004 y 2005 tuvimos los atentados de Madrid y Londres. Muchas personas pensaron que las bolsas como años atrás bajarían y bajarían durante meses y muchos que habían creado unas excelentes carteras, por esta noticia cerraron sus posiciones.

Había una diferencia de fondo enorme. Durante 2001 la tendencia del mercado era bajista, pero no desde septiembre de 2001 sino desde mucho antes (desde marzo de 2000 los mercados únicamente bajaron y bajaron y llevaban un año y medio bajando). Cuando sucedieron los atentados del 11S lo que ocurrió fue que los mercados pronunciaron todavía más la tendencia de fondo.

En cambio en 2003 los mercados comenzaron a subir y subir, quien vendió en los atentados de Londres y/o Madrid, se equivocaron totalmente, simplemente porque la tendencia de fondo era alcista y esta noticia no hizo cambiarla. Los grandes operadores aprovecharon las ventas masivas para comprar.

Lo que trato de explicar, es que si usted está en una operación y tiene un stop bien colocado, éste saltará cuando tenga que saltar por el motivo que sea (por una noticia, nacional, internacional o por cualquier hecho diferente, o incluso por un cambio de tendencia). Que nada cambie su estrategia, únicamente cambie cuando cambie la tendencia.

Si cualquier persona parte de la premisa de que es imposible, totalmente imposible, predecir lo que una acción hará mañana o la próxima semana o incluso los próximos meses... si cualquier acepta que un valor en el futuro puede moverse en cualquier dirección, ¿por qué dar consejos a terceros de que sabe lo que este valor hará en el futuro?

Nadie sabe lo que hará la bolsa en el futuro, nadie, porque hay tantas variables económicas, nacionales, mundiales, de la propia empresa, de su sector, de tasas de interés, catástrofes naturales, guerras, atentados, decisiones políticas y demás, que harán que el futuro sea incierto en su totalidad.

Aceptar que una acción puede hacer cualquier cosa en el futuro, es tener mente realista y de ganador, por lo tanto usted compre y ponga su stop por si su predicción errara. No obstante no aconseje a nadie comprar el valor, porque lo único que conseguirá será enemigos.

¿Llamará usted a sus amigos o conocidos, para que cambien el stop en cada caso cuando haya subido la acción? ¿Les dirá cuantas acciones comprar a cada uno? Es más... si cada semana da consejos a unos y otros, ¿se acordará de todos ellos? Créame, únicamente conseguirá criticas.