Después de tantos años de relativa tranquilidad, parece que no es fácil vivir los tiempos actuales; pandemia, guerra en Europa, desabastecimiento energético, deudas infinitas… y es que es evidente que desde hace unos años tomamos el camino hacia ningún lado, y por las noticias que nos van llegando, no hay muchos síntomas de mejora.

Pero, ¿y si te dijera que estos son solo síntomas de un tipo de sistema debilitado que ya ha ocurrido en otras ocasiones?

A lo largo de esta y próximas neswletters explicaremos qué es eso del Nuevo Orden Mundial, en el siguiente desglose:

(I) ¿Qué es un Nuevo Orden Mundial y cómo se crea?

(II) Las diferentes fases por la que pasa un Orden Mundial y ejemplos.

(III) ¿Por qué este modelo está agotado y cómo caminamos hacia uno nuevo?, ¿Cuál podría ser y… cómo beneficiarnos del mismo?

Y por supuesto, para explicar todos estos conceptos, me apoyaré en el último libro de Ray Dalio, Principios para Enfrentarse al Nuevo Orden Mundial.

En primer lugar, un Orden Mundial no es más que un sistema de gobierno para que las personas vivan e interactúen entre ellas, en el que una nación se erige como hegemónica con capacidad de influencia política, económica y cultural sobre sus colindantes. Lo único es que en un planeta globalizado sus colindantes son… el resto del mundo.

Por ende, no debemos asustarnos cuando oímos la expresión Nuevo Orden Mundial, ya que los órdenes mundiales han existido desde siempre. Los Romanos impusieron el suyo, la época medieval y la Iglesia también, los españoles, los árabes, los chinos o los soviéticos… como vemos, es algo bastante común que permite a las personas entender las reglas de juego, e interactuar en consecuencia.

Y sí, como podrás imaginar, el Orden Mundial actual se inicia en 1945 con EEUU como potencia hegemónica.

Además, podemos diferenciar órdenes mundiales en dos tipos:

Gran ciclo: Abarca un periodo de 250 años que incluye a varias naciones alternándose la hegemonía dentro de un patrón de convivencia común.

Pequeño ciclo: Son periodos de entre 80-110 años donde un país impone su modelo a los coetáneos. En dichos periodos pueden llegar a alternarse dos o tres naciones, que aunque diferentes comparten la filosofía base de un mismo modelo

Podríamos decir, que en el momento actual vivimos en el Orden Mundial del Gran Ciclo de Occidente, y pequeño ciclo de EEUU (anteriormente Inglaterra)

¿Y cómo se genera un nuevo orden mundial?

Realmente (y siempre de acuerdo al libro de Dalio), son necesarios 4 factores:

Descubrimiento de una hecho que aporte ventaja competitiva sobre los demás. Por ejemplo, los romanos perfeccionaron el sistema político griego, los españoles descubrieron un nuevo mundo y sus posibilidades, los Holandeses entendieron mejor que nadie el credo capitalista, y los EEUU vencieron en la II Guerra Mundial, encontrándose un mundo dividido y a medio construir.

Liderazgo capaz de convencer a la oposición, para que (con sus legítimas diferencias) ambos remen en la misma dirección.

Instituciones sólidas e independientes de populismos.

Saber elegir bien a los sucesores de esos primeros líderes (o el sistema que los elegirá).

En consecuencia, la nación que es capaz de acumular estos 4 principios se convierte en la hegemónica, llevando sus costumbres, comercio, excelencia intelectual, inventos y moneda a todos los rincones del mundo, y aquí está la clave.

Con el tiempo, todos los países quieren la moneda de ese país como moneda de ahorro, pues como todo el mundo la usa, es lo más seguro que existe, por lo que la moneda de dicha nación, se convierte en la Moneda de Reserva Mundial, y el país hegemónico, en receptor de fondos de todas las partes del mundo. Actualmente esa moneda es el dólar, pero en otras épocas lo fue el florín (holandes), el real (español) o el denario (romano).

Con ese caudal de fondos, los Estados empiezan a subvencionar obras absurdas y a despilfarrar, así como a subvencionar a su población para tenerla contenta, es cuando se dan inicio las burbujas financieras (que desembocarán en inflaciones y a la postre en recesiones), y por supuesto, en dichas épocas la corrupción de sus gobernantes, tiende a ser muy elevada. Pasadas un par de generaciones, los nuevos miembros de la sociedad hegemónica, ya no compartirán ese entusiasmo por el trabajo, y el esfuerzo de los de las primeras, y sí otros valores más hedonistas así como pasión por trabajos bastante menos productivos.

¿Y qué es lo que pasa aquí? Simple y llanamente empieza el declive de dicho orden mundial, en favor de uno nuevo. Pero ¿cómo se da ese proceso?

Para responder a dicha pregunta, estate atento, porque lo veremos en la newsletter de la semana que viene, así como sectores de inversión y empresas en máximos históricos que nos podrán ayudar a protegernos.