Este año, se ha producido una cambio a favor de las energías renovables, cuyo consumo para producir electricidad ha aumentado considerablemente, es más, por primera vez en la historia ha superado al consumo de combustibles fósiles para este fin.

Según un informe del grupo Ember, en los primeros seis meses de 2020 las energías renovables produjeron un 40% del total de la electricidad, mientras que el 34% de este total ha llegado de la mano de los combustibles fósiles.

Sin duda, se trata de un hecho histórico y simbólico pero que puede marcar un punto de inflexión en este sector.

La tendencia del sector va encaminada en este sentido, ya que desde 2017 observamos un aumento de la producción con energía renovable en un 33% -pasando de representar el 30% en 2017 al 40% en 2020-.
Por otro lado, la tendencia de la producción mediante combustibles fósiles ha pasado de representar el 44% del mercado al 34% de este año, lo que supone una reducción de casi el 25%-.

En el entorno actual del mercado, las energías renovables han crecido un 11% respecto el 2019, mientras que la producción mediante combustibles fósiles ha bajado casi un 20%.

Encontramos que la materia prima más golpeada ha sido el carbón ya que ha experimentado una reducción del 32% en toda la Unión Europea.

Por el contrario, todos los tipos de energías renovables han visto crecer su producción. Por ejemplo, la energía solar y la energía hidroeléctrica han subido un 16% y un 12% respecto 2019, respectivamente.

Sin duda, las energías renovables son el futuro, eso, sin contar las políticas cada vez más restrictivas y activas de los gobiernos hacia la producción de energía ''limpia''.